Enemigo de la transparencia y rendición de cuentas, proclive a falsear datos que impidan conocer el monto de sus riquezas, el gobernador Juan Manuel Carreras López, con su oblicua conducta, ha generado múltiples suspicacias en torno a sus ingresos mensuales, ya que se manejan cifras disímbolas. Lo ubican como el segundo mejor pagado en todo el país, apenas superado por su homólogo de Guanajuato, Miguel Márquez, que percibe al mes 207 mil 306 pesos. El doctor en derecho percibe 198 mil 654 pesos al mes, según datos de una lista nacional donde contrastan los ingresos de los restantes mandatarios. Resulta un funcionario caro, ya que su desempeño ha sido irregular. No obstante haber contado con un presupuesto de 35 mil millones de pesos en el primer año de gestiones, no llevó a cabo una obra relevante que lo identifique. Al contrario, se empecinó en construir un metrobús sobre la avenida Industrias que rechaza la mayoría de habitantes, ya que afectará a miles de comercios. Insiste en hacer obras innecesarias y superfluas en la avenida Carranza, la de mayor plusvalía en la capital, sin tener el aval de los beneficiarios. Errático, sin rumbo, Carreras ha sido cuestionado por su abulia para resolver los incontables feminicidios, secuestros, levantones, asaltos, robos de vehículos, hogares y transeúntes. Por su comprobada inoperancia, los articulistas del diario Pulso, Leonel Serrato y Oswaldo Ríos, irónicos, lo llaman Carreritas y Gutierritos, con lo que aluden a un patiño de telenovela, un oficinista sin carácter al que todos pisotean. Como a Carreras, esclavo de los grupos que lo llevaron al poder.
En la lista de salarios que se anexó a la iniciativa de la ley de presupuesto de egresos 2016, presentada por el ejecutivo al congreso en diciembre del 2015, se estableció que Carreras tendría un salario de 54 mil 327 pesos. La cantidad se publicó en las instancias de transparencia del gobierno estatal. En junio del 2016 se supo que en realidad ganaba 139 mil pesos mensuales. No se aclaró si son netos, con o sin impuestos, ni si tenía otros ingresos como bonos o compensaciones, ya que se ubica en el nivel 20 de la burocracia. Tuvo un súbito incremento del 155%, equivalente a 84 mil 678 pesos. El combativo dirigente de Ciudadanos Observando, José Guadalupe González Covarrubias, denunció que los ingresos de Carreras son confusos, al manejar dos cifras distintas. En el portal electrónico institucional se manejó que percibía 137 mil 746.26 pesos hasta el 31 de mayo del 2015. Citó que en la página de transparencia que maneja el secretario de finanzas, José Luis Ugalde, aparece un tabulador donde se consigna que el académico tiene ingresos por 54 mil 327 pesos. González aludió al portal Uniónjalisco, donde se dijo que el ex mandatario Fernando Toranzo, en el 2013 ganaba 132 mil 146 pesos, pero en el 2015 alcanzó los 196 mil 654.52 pesos. En la página electrónica del gobierno estatal le adjudicaron una paga de 137 mil 746.28 pesos.
Sin embargo, en el presupuesto de egresos del 2017 que los diputados locales aprobaron el 15 de diciembre, aparece que Carreras tiene proyectado percibir ingresos anuales por 2 millones 231 mil 918 pesos. Al mes, 185 mil 993 pesos. Los diputados aprovecharon la coyuntura para sacar su propio beneficio. Por las presiones sociales, acordaron reducirse 25 mil pesos. Si ganaban antes 115 mil 858 pesos, ahora recibirán 162 mil 816 pesos, para alcanzar al año un total de 2 millones 207 mil pesos cada uno. Acumulan prestaciones por casi 800 mil pesos, donde se encuentran 90 días de aguinaldo, dos primas vacacionales, seguro de gastos médicos, pagos de asesorías, gestiones y otros rubros. Los 27 legisladores absorben 81 millones 209 mil 384 pesos al año. Hay dos alcaldes que le compiten en voracidad salarial a Carreras. El de Xilitla, el panista Xavier Pacheco Sánchez, cobra por sus servicios 109 mil pesos al mes. El municipio tiene un 85% de pobreza extrema. Cada rato viaja al extranjero de picnic. Otro con altas percepciones es el edil priista de Tamasopo, Gabriel Hernández Aguilar, que percibe arriba de 104 mil pesos al mes. No le importa cargar estadísticas del 73% de pobreza extrema. Carreras destacó que sus percepciones se ubican dentro del marco legal. Presumió que las maneja con absoluta claridad. Paternalista y solidario, el oficial mayor, Elías Pecina Rodríguez, enfatizó que el ejecutivo gana 139 mil pesos desde el 2012. Aceptó que existe un error en el portal de transparencia.
Debido al vacío de poder que genera Carreras, la secretaria de salud, Mónica Liliana Rangel Martínez, al comparecer ante los diputados, después del primer informe de actividades de su jefe, reveló que gana 222 mil 251 pesos mensuales. Más de 80 mil que el propio Carreras. La dirigente del sindicato minoritario de burócratas, Francisca Reséndiz, denunció que por la cifra desorbitante, la funcionaria se imagina intocable, una diosa. «Es una burla para los trabajadores y usuarios de los servicios de salud, ya que sobresale por correr a más empleados. Ha cerrado varias clínicas en la huasteca por falta de recursos. El hospital central padece de insumos con frecuencia». Solicitó al auditor superior del estado, José de Jesús Martínez, investigar el salario de los integrantes del gabinete estatal, donde podrían manejar una nómina maquillada. Carreras se proyectó defensor de la norma. Destacó que existe un principio constitucional donde se establece que nadie puede superarlo en ingresos. Se refería al artículo 133, apartado II donde habla que ningún funcionario ganará más que el gobernador. El tabulador estatal del 2016 consignó que los secretarios perciben 128 mil 608 pesos como máximo. El diputado Óscar Bautista señaló que buscarán equilibrar las pagas para no dañar la economía de los ciudadanos. Justificó las ganancias de Rangel, ya que además de secretaria es directora de los servicios de salud. Alardeó que los legisladores se bajaron el ingreso en 25 mil pesos, lo que deben imitar los integrantes del ejecutivo y judicial.
En las redes sociales se comentó que San Luis ocupa el sitio 16 en el Producto Interno Bruto. El poder adquisitivo de sus habitantes en promedio es de los más bajos. Según indicadores nacionales, el 49.5% de los pobladores viven en pobreza y pobreza extrema. En tal contexto, Carreras «tiene el segundo sueldo más alto de todos los gobernadores. Gana 10 mil dólares al mes, 197 mil pesos, más otros ingresos, como el llamado bono de productividad y eficiencia. A tal individuo no se le puede tener el mínimo respeto. Más, por tratarse de un intelectual preparado. Es otro vulgar abusador de la gente que baila al son del dinero mal habido. ¿En verdad creen que paga la gasolina de su coche?. Es una pena que nos gobierne». Previo a las elecciones, Carreras como otros candidatos, se comprometió en dar a conocer sus declaraciones patrimoniales, de intereses y fiscales. No cumplió, lo mismo que el ganador de los comicios en Campeche, Rafael Alejandro Moreno Cárdenas. Al contrario, fue exhibido de alterar datos. El ex diputado local y notario público número uno, Eduardo Martínez Benavente, aseveró que «su declaración patrimonial es oscura e imprecisa. Es uno de los asuntos más delicados que se le han remarcado, por lo que debió debió esmerarse en transparentarla, proporcionar todos los datos actualizados de sus bienes. Sin importar que la deficiente normatividad que regula la obligación no se lo exija. Me refiero a los inmuebles que ocupan los dos planteles de la universidad de Estudios Superiores, el de Madero y Venustiano Carranza, que hasta hace poco eran de su propiedad y ahora no aparecen en su inventario…continúa (tomado de la revista impresa, DICIEMBRE 2016)