La variante Delta del Covid se originó en la India. Aunque una gran parte de los pobladores se habÃan vacunado, dejaron de tomar las medidas sanitarias. El virus retó el descuido y se dio. Es un segmento que se replica mÃnimo, mil veces más que la cepa original y puede evadir en cierto grado, la memoria adquirida por otros contagios. Es por lo que tenemos pacientes con reinfecciones. El periodo de incubación es la mitad del tiempo. Genera brotes grandes y explosivos, afirma el doctor en ciencias de la salud, Andreu Comas GarcÃa.
Añade. “En otros paÃses, tiene predominancia la variante Delta, con curvas muy elevadas que parecen una vertical o un muro. Es por la rápida velocidad en la que se desarrolla. Dicen que es de 40 a 60% más contagiosa. Una persona con el virus inicial, en condiciones climáticas óptimas, puede afectar de 2 a 3 personas. El Delta entre 6 a 8 personas y es la variante que predomina en el paÃs. En la semana 28 y 29, los casos aumentaron arriba del 90%, de la 29 a la 30, más del 100%. Se doblaron las hospitalizaciones y hubo incremento en la tendencia de mortalidadâ€.
“Los tres parámetros son consecuencia de la variante Delta, que es la predominante en San Luis, con una cifra récord, seguirá la tendencia de crecimiento a corto plazo. Es importante que la gente entienda y razone que si tiene sÃntomas o son sospechosos, se deben aislar, junto con los que tuvo contacto y hacerse las debidas pruebas. Es la única manera de evitar el brutal crecimiento. En el virus original, presentaban sÃntomas al sexto dÃa de exponerse. Con la variante, salen positivos al tercero. Hemos tenido varios casos de reuniones los sábados y para el martes empiezan a salir positivos y con sÃntomas. La tasa de ataque es muy grande. Si es un grupo de 10 chavos, se infectan todos. Tenemos que ser responsables, nada de fiestas, antros, bodas y demás. Es lo que nos ha llevado a un crecimiento desmesurado de incidentesâ€.
Precisó que la variante Gama surgió en Brasil a finales del 2020. La Delta en la India, también el año pasado. La Gama llegó en febrero del 2021 por el caribe mexicano. Fue la predominante en el sur y centro del paÃs durante tres meses. Ya casi se extinguió por la presencia de la Delta, que se registra en el 99% de los casos en el paÃs. “Cuando se realiza una vacuna, siempre se tiene en cuenta que existe la alternativa que surjan variantes. La eficacia es menor con la Delta y Gama. Por fortuna, no disminuye tanto como en la Beta, que estuvo en Sudáfrica y que ya desapareció. Las personas que tienen doble dosis de la vacuna Pfizer o Astra Zeneca, el sistema completo, la eficacia es muy alta. Es normal que se vaya a requerir un refuerzo en los casos de una sola dosisâ€.
“Hay que seguir con el cubre bocas todo el tiempo que estemos fuera de nuestras casas. En espacios cerrados, con mayor razón. Si alguien sale positivo, no tomar medicamentos, primero hay que medir la respiración y frecuencia cardiaca, unas tres o cuatro veces al dÃa. Si la respiración comienza a bajarse y la frecuencia cardiaca a elevarse, acudir a un médico para evaluar al paciente. Si está infectado, empezar con el tratamiento adecuado en lo inmediato, lo que evita, se inflamen los pulmones. Al final, es lo que termina por matar a los pacientes. Cuando alguien sale positivo, en lo inmediato debe acudir con un médico internista, neumólogo, infectólogo, ya que se necesita un trato avanzado y delicadoâ€.
“Seguir con un monitoreo muy estrecho de las necesidades del enfermo. Algo donde la ciencia de la medicina se convierte en arte, es saber en qué momento se inflaman las vÃas respiratorias para darle la receta adecuada. La vacuna es eficiente en el sentido de reducir el riesgo de mortalidad y no ser hospitalizado. Sin embargo, no por estar vacunados, no quiere decir que no se pueden infectar. Después de inyectarse, hay que continuar con el cubre bocas, ventilarse, tener un lavado constante de manos y el área donde se ubiquenâ€.
“No obstante estar vacunado, si hay una gripa, por más leve que sea, hay que aislarse y hacerse la prueba contra el Covid. Hay inoculados que han fallecido porque son diabéticos, tienen más de 70 años y cargan
otra enfermedad. Tenemos que cuidar a la gente mayor. Los sÃntomas de las personas vacunadas no son iguales, aparecen leves y sutiles. La gente tiende a menospreciarlos. En algunos casos se requiere hospitalizarlos, aunque son neumonÃas ligeras. Es por lo que se necesita el acercamiento con un médicoâ€.
“Para la variante Delta, se necesita cumplir con la segunda dosis. Hay casi 20 millones de vacunas almacenadas. Necesitamos que se apliquen para completar el cuadro. Con una no disminuye que la enfermedad sea severa. Empecemos a vacunar a los que no han acudido, por lo que se aumenta el número de infectados. Las personas que tienen una sola dosis, no evitan el riesgo de contaminarse. Es tarea del gobierno federal, reciban las segundas dosis, antes de empezar la tercera para la gente muy vulnerable. Primero cumplir los esquemas de dos dosis y segundo, incrementar las vacunas de los que faltanâ€.
“Vamos atrasados con el resto de América Latina. No son problemas de logÃstica. Antes de iniciar el programa, renunció el Consejo Nacional de Vacunación. Los encargados de aplicarlas son los trabajadores de la SecretarÃa de Desarrollo Social, que no tienen experiencia. Fue acertado iniciar con los más vulnerables, para reducir el grado de mortandad. Ahora son los jóvenes los que han transmitido más el virusâ€.
“En México las inyecciones han sido lentas porque no es productor de vacunas. Además, no participó el consejo nacional del ramo, los que siempre atendieron la demanda. La Sedesol no tiene estructura ni enseñanza. Es un error, no exigir el uso obligatorio de cubre bocas. Por no adelantarnos a las pruebas de Reacción en Cadena de la Polimerasa o PCR en todo el paÃs, motivó la tercera ola de contagios. Entró la variante Alfa, Gama y Deltaâ€.
“Uno de los errores más graves fue no iniciar por las ciudades, lo hicieron en los lugares más alejados y menos poblados. Fue acertado empezar con los de la tercera edad. Ahora es prioritario vacunar a los jóvenes, porque son los que más propagan las infecciones. El regreso a clases es peligroso, salvo que se vacune a todos los niños, baje el pico de la pandemia y haya protocolosâ€.
“El Covid no quedará sepultado, será como el de la influenza. Tendremos que aprender a convivir a un lado el resto de nuestras vidas. Es uno de los virus que puede extinguir a la raza humana. Es por lo que las vacunas son vitales. La gente debe entender lo peligroso que es, cuidarse y mantener las medidas de seguridad necesariasâ€.
“Hay vacunas con mayor eficacia, es cierto. Sin embargo, a nivel poblacional, no importa la marca que se tenga, mientras reduzca el riego de hospitalizarse. Si lo hacen, es menos del 4%. Lo importante es que ahora estemos todos vacunados, sin excepciones. Y en un futuro, poder elegir la mejor para todosâ€.
“Las de una dosis, no son menos o más eficiente que las de dos. Por cómo fueron diseñadas, las de una dosis, tarde o temprano, necesitarán de un refuerzo, como las demás. Nos dan tiempo para lograr la cobertura, crear anticuerpos y no se pierda la eficacia. Ayudan a reducir la mortalidad y hospitalizacionesâ€.
“No han funcionado los anuncios para reducir los contagios. El problema es en extremo serio, por lo irresponsable de la gente. Vemos reuniones y fiestas con las que surgen las nuevas variantes. Más que las restricciones que imponga el gobierno, tenemos una gran falta de compromiso y solidaridad. No hay empatÃa, no se aprendió nada. Seguimos sin querer usar el cubre bocas, hacemos festejos, pareciera que importa más la vida social que la saludâ€.
“En el paÃs llegamos a tener muertes por narcotráfico, con números altos. Lo mismo sucede con la pandemia, pero ya no le importa a los otros. Más del 80% de las hospitalizaciones son de personas no vacunadas. Arriba del 94% de las muertes es de gente que se niega a hacerlo. Volveremos a semáforo rojo, se tendrá un impacto económico, pero no será como la vez anterior. Las restricciones serán menores, por lo que habrá un resultado serio en las transmisiones de la epidemia y la saludâ€.