El presidente del patronato de la Feria Nacional Potosina, Rafael Villalobos Márquez, es un bohemio consumado. Le apasiona tocar la filarmónica en las fiestas, con los amigos y familiares. Incluso, ya formó un grupo con dos de sus hijos. Añora las reuniones quincenales en casa de Ticho Páramo, en Himno Nacional, cercano al viejo estadio de fútbol. Discreto, el grupo se juntaba a las 7 de la tarde y se iban a las 12 de la noche, sin armar escándalos.

Exalta su amistad con la cantante América Wong, que ha grabado algunos discos. Se anima a acompañarla «después de unos tequilas». Juntos entonan boleros románticos. Luego a las tertulias sólo invitaron a los que les gustaba el canto, para no hacer mescolanza con los que optaban por el jolgorio.

El gusto por la música de Rafael Villalobos proviene de su madre, la soprano oriunda de Chihuahua, Mauricia Márquez. Cuando el ex empresario cervecero se casó a los 25 años, su progenitora le cantó el Ave María, acompañada de la orquesta de la iglesia. «Había contratado una persona para que filmara la ceremonia religiosa. Pero el sujeto envió a un hijo inexperto que grabó las paredes y el piso. Y luego, en lugar de prender la cámara, la apagó».

Para complacer a su mamá, Villalobos compró un sofisticado equipo de grabaciones. Le bajó de internet múltiples pistas, para que cantara. Sobre todo, las obras de Agustín Lara, al que idolatró. Relata que su nieto, Luis Nava, biznieto del líder cívico, Salvador Nava, es un auténtico tenor. Aunque estudia medicina, en sus ratos libres participa en el taller de canto de la universidad autónoma bajo el mando de la maestra Lilian del Conde. Para festejar los 100 años del nacimiento de Frank Sinatra, acompañado de la orquesta sinfónica universitaria, interpretó New York con gran éxito. Le aplaudieron cientos de asistentes. Villalobos tiene otra nieta soprano que también estudia danza en el Distrito Federal.

Recordó que en su infancia quiso tocar piano y guitarra, pero su padre no lo dejó. Temió que se dedicara por siempre a la pachanga y se desvelara toda la vida. Lo único que maneja es la filarmónica, un instrumento básico en el rock, como en la pieza el hombre del piano, donde se capta su preponderancia. Enfatizó que el Tri la usa en el 60& de sus producciones.

Rafael Villalobos indicó que busca hacer la mejor feria de todo el país. Se recorrió 5 días para que coincidieran dos quincenas. Se llevará a cabo del 12 de agosto al 4 de septiembre. Expuso que al teatro del pueblo se le invertían 9 millones de pesos, ahora la suma es de 14, para traer artistas de calidad. Además busca patrocinios que le ayudarán a solventar los gastos de tener al circo Atayde, las muestras ganaderas e industriales. En su reciente visita a Aguascalientes, en labores promocionales, se encontró a Rosita, hija de la dueña de la famosa cocina Doña Petra, que antes estuvo en San Luis, cuando la feria se hacía a un costado de las instalaciones del PRI. La heredera se comprometió a traer de nuevo la gastronomía casera, mexicana, con alta demanda.