No hay plazo que no se cumpla, ni fecha que no se llegue. Ha comenzado oficialmente el proceso local electoral 2020-2021. El Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPAC) dio la voz de arranque el pasado 30 de septiembre. A partir de ahora los aspirantes a un cargo de elección popular serán protagonistas de un proceso electivo que culminará el 6 de junio del próximo año cuando los electores acudan al llamado de las urnas. Una vez más nuestra democracia será puesta a prueba.
Está comprobado que ninguna elección es igual a otra. Cada proceso electoral se da en circunstancias concretas y distintas. Tampoco hay triunfos garantizados de antemano. Asà que seremos testigos de una guerra de estrategias que tendrán como objetivo la conquista del poder.
La primera decisión que toman los partidos polÃticos en cuanto al método de selección de sus candidatos es trascendente para impulsar una estrategia ganadora.
Cada partido cuenta con Estatutos que rigen su vida interna y en ellos están señalados los métodos de selección de candidatos. La forma en que se elige a los abanderados puede ser abierta a la participación de los militantes o cerrada al antojo de las élites que controlan el aparato partidista. El método y la limpieza con que se selecciona a los futuros competidores suma o resta legitimidad al elegido (a). Los electores observan y comienzan a simpatizar o a rechazar a los partidos y a sus candidatos dependiendo de cómo practican su democracia interna.
En esta circunstancia los dirigentes están obligados a ser bastante meticulosos. Deben hilar fino, con extrema sensibilidad y habilidad polÃtica. De lo contrario, si operan con machete y no con bisturÃ, pueden descarrilar el proceso de selección y provocar la división interna.
Asà las cosas, tenemos que en el Partido Acción Nacional ya se ha decidido que sea a través de una elección en la que sólo votarán sus militantes como se seleccionará a su candidato o candidata a la gubernatura. Es un método democrático que satisface los deseos de sus bases de apoyo.
En cuanto a MORENA hay certeza de que utilizarán las encuestas o la insaculación (tómbolas) para elegir candidatos. Pero debido a que en este momento se está llevando a cabo el proceso de elección de dirigentes nacionales y de que reina la incertidumbre se retrasará cualquier decisión al respecto. Será hasta finales de octubre cuando este tema adquiera relevancia en la agenda de este partido.
En el PRI será a través de Convención de Delegados y de una Comisión Especial para la Postulación de Candidatos, esta última para garantizar las cuotas de género, de jóvenes e indÃgenas.
En el resto de los partidos (los de minorÃa) aún no hay definiciones. Lo más seguro es que se sumen a un candidato fuerte de otro partido firmando alianzas (Coalición o Alianza Partidista).
Pero mientras son peras o manzanas ya han alzado la mano los primeros aspirantes a candidatos a gobernador. En Morena Leonel Serrato y Toño Lorca lo hacen sin hipocresÃas anunciando que se la juegan. Gabino Morales hace fintas y manda a sus amigos “Defensores de la Patria» y a varios diputados locales a que lo destapen. AdrÃan Esper suelta un buscapiés asegurando que Morena y el multimillonario Carlos Slim lo quieren de gobernador en San Luis PotosÃ. Xavier Nava se abre de capa, muestra músculo y se luce el dÃa de su Segundo Informe de Gobierno. Está listo. Y en el PAN Marco Antonio Gama, Octavio Pedroza y Sonia Mendoza echa su resto con brÃo y audacia.
En los mentideros polÃticos se menciona a otros que presuntamente estarÃan dispuestos a lanzarse al ruedo: Alejandro Lozano, Rolando Hervert, Ricardo Gallardo, Joel RamÃrez, Mónica Liliana Rangel y Sara Rocha. En cuanto a Juan Ramiro Robledo da la impresión de que aún está deshojando la margarita. Todos ellos y ellas deberán tomar una decisión a más tardar a principios de noviembre ya que el dÃa 10 empieza la fase de “precampañas†al interior de cada partido. Pero será hasta finales de enero de 2021 cuando sepamos quienes serán finalmente los candidatos oficiales en los distintos partidos polÃticos.
Suenan los tambores de guerra. Pronto empezaran las hostilidades. Nadie tiene el triunfo asegurado.