Ni la secretaría de comunicaciones estatal que dirige Ramiro Robledo López ni el ayuntamiento de la capital, ahora con Xavier Nava, se han enterado ni atendido el desmantelamiento y robo de techos de aluminio de paradores de autobuses urbanos que se presentan en el oriente de la ciudad. Los hurtos de los techos ocurrieron desde el último mes del trienio de Ricardo Gallardo Juárez, que derrotado, despareció un tiempo de la escena política y dejó en total abandono a los potosinos. Ahora el nuevo edil y sus colaboradores, absortos en denunciar las pillerías de su antecesor, se olvidan de atender los servicios básicos.

En un tramo de 4 cuadras de la avenida Ricardo Basilio Anaya que abarca desde el Eco Mercado hasta antes del centro de abastos, se pueden observar las afectaciones de por lo menos 4 paradores. Los usuarios del trasporte tienen que soportar sol y lluvias ante la indiferencia de las autoridades. Ahora los ladrones han cargado con los asientos. En su comparecencia con los diputados, Robledo López presumió la infraestructura que se tiene, publicó, dio cifras alegres y enumeró los paradores que existen. Pero no ha hecho nada para reparar o pronunciarse por el atraco del aluminio que en el mercado negro tiene un costo de 15 pesos.

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