Hay gente que cambia sus ideales. Es como el camaleón que tira la piel. Se trata de vividores pegados al presupuesto. Es como describe el empresario Mariano Maya Romero al llamado coordinador general del Frente Urbano Gallardista, Jesús Rafael Aguilar Fuentes alias el «Chiquilín. “La pregunta es ¿por qué cambió?. ¿En dónde quedaron los principios que defendió del ex líder cívico Salvador Nava?. ¿Dónde está su lucha social?. Aguilar siempre ha buscado el beneficio económico por todos lados. Ofende a grandes figuras públicas sin argumentos. Antes criticaba que el PRI y PAN eran populistas, que lucraban con el voto pero el PRD donde milita hacen lo mismo. Lo contrataron para desacreditar a la gente que en realidad hace algo positivo por San Luis. Ahora con el apoyo que tiene del alcalde Ricardo Gallardo se ha envalentonado. Pero lo único que ha logrado es perder credibilidad. ¿Por qué no se amarra al palacio municipal como antes y hace sus huelgas de hambre de 4 minutos?. Es un cínico, vividor y mercenario».

Añadió que «lo peor es que está consciente de lo que hace. Pero cuando se es un hombre vendido, no hay conciencia ni valores. Hay muertos que valen mucho y gente que en la vida estorba. Eso es el Chiquilín. No me sorprendería que si llega otro partido y le ofrece más prebendas, traiciona a sus actuales jefes. No le interesa más que el dinero. Es por lo que se vende al mejor postor�. Citó una larga lista de agravios por parte de Rafael Aguilar. Cualquiera que ose criticar a los Gallardo, se hará acreedor a las ofensas y chivatazos sin argumento del otrora herrero. “Le regla dice que no discutas ni te pelees con un estúpido. Es rebajarse a su nivel y ganará por su experiencia. Pero ya nadie cree sus ofensas. Es más falso que una moneda de dos águilas. No alcanzo a comprender cómo dio un cambio de 360 grados. Antes a todo mundo le tumbaba dinero para medicinas o comida. Ahora que se subió a un ladrillo se dedica a ofender sin reposo. Hasta a los que en algún momento lo ayudaron. ¿Dónde cabe tanta ingratitud?».

Maya indicó que «verdaderos líderes sociales como Juan Antonio Rodríguez Chessani y Arturo Pérez Alonso eran muy amigos de Aguilar. Pero vino la ruptura cuando le dijeron sus verdades. En el debate que Rodríguez y el Chiquilín tuvieron en el programa Mirada Crítica del Canal 13, dirigido por Luis Manuel Calzada, Aguilar perdió y quedó en ridículo. Nunca tuvo argumentos sólidos, por lo que se fue a las agresiones como siempre. A los que representa, se decepcionaron por su desempeño».

«Ha tenido muchos patrocinadores. Mi hermano Miguel Maya Romero le cubrió un diplomado en derecho electoral. El dueño del partido Conciencia Popular, Óscar Vera, lo mantuvo varios años. Como pago, lo ataca de manera visceral. No valora que lo sacó del pantano. Lo mismo hizo con el notario público número uno, Eduardo Martínez Benavente, que también lo ayudó y le mató el hambre. Ahora lo ataca con pestes. Traicionó a su hermana Lucero Aguilar. No la apoyó cuando mencionó que Ricardo Gallardo la quería desaparecer. ¿Si traiciona a su propia sangre, con mayor razón a los demás?. No conoce la lealtad. Aguilar debe mantenerse callado. No sabe conectar la lengua con el cerebro. Saca lo que puede. Cuando nota que ya no escurre nada, se cambia de bando. Es un camaleón. Podrá tener otras siglas, pero su forma de ser, su mentalidad de traidor nunca la perderá. No tiene una ideología o la defendería con la vida. Es un niñote atrapado en el cuerpo de un adulto que dice puras tonterías. Si mantiene los principios navistas, hubiera llegado muy alto».

Maya estableció que «está enojado conmigo porque lo puse en su lugar. No le gusta que lo critiquen, pero ataca sin argumentos y ofende a las personas. Al rato va a regresar a lo mismo: a estirar la mano de un lado para otro. Conocí a Rafael Aguilar cuando Rodríguez Chessani me lo presentó para que me hiciera algunos trabajos de herrería. Le di un anticipo de 12 mil pesos, pero jamás me entregó el encargo. Menos regresó el dinero. Se imagina que con sus chistes e idioteces lo perdoné. Es falso. La culpa fue mía, nunca le di a firmar nada porque confié en su fidelidad y honradez, pero me equivoqué. Intenté cobrarle varias veces pero se ofendía, me daba largas. Siempre anduvo tras el dinero fácil, donde le daban, no se movía. Ahora se dice amigo de los Gallardo, cuando siempre habló de sus oscuros negocios. Toda la gente lo sabe».

Expuso que «el herrero traicionó los principios del navismo que llegó a enarbolar. Es un tipo desleal. No cabe duda que en algún momento también traicionará a sus actuales dirigentes. O se darán cuenta que es un desecho. Lo habrán de correr cuando no los afecte si llegara a hablar, por el momento lo mantienen entretenido�. Maya Romero explicó que la cambiante conducta de Aguilar se podría explicar «por los conflictos mentales que tiene debido a las drogas que nunca dejó. Lo invito a que se haga un antidoping y lo publique. Pero acuda a un laboratorio profesional donde no manipulan ni venden las pruebas. No se le puede comparar con nadie. Sabe un poco de oratoria, es todo. No se le mira un futuro político. Es un cartucho quemado. Ya está en la nómina de Gallardo, al que debe exaltar».

Mariano Maya subrayó que cuenta con pruebas sobre las diversas averiguaciones previas que existen en contra del herrero Aguilar sobre despojos y fraudes cometidos en el 2008. «Como no se tienta para decir mentiras, uno también puede defenderse, pero con pruebas contundentes. Traiciona por unas monedas a quien lo ayudó. No es ningún luchador social, menos de izquierda, porque no tiene espíritu de servicio y no es honesto. Ha cometido mucho daño. Los afectados pueden contar sus testimonios. Se le puede aplicar el dicho, despiértale la ambición a un pendejo y habrá de enloquecer�.

 

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