
Fernando Carmona exige castigar un desfalco que podría alcanzar los 300 millones de pesos
30 marzo, 202011:18 pmAutor: Juan Pablo MorenoCapital Destacada Noticias
El ex corresponsal de Uno más Uno y ex jefe de prensa de la dirección de seguridad pública, José Fernando Carmona Cruz, denunció ser víctima del robo de identidad, por parte del ex secretario de finanzas, José Luis Ugalde Montes, que le adjudicó un pago inexistente por casi 3 millones de pesos como presunto vendedor de ropa al gobierno estatal, lo que nunca aconteció. Indicó que en el mismo caso, se encuentran decenas de inconformes, por lo que el fraude al erario podría oscilar en los 300 millones de pesos. Los afectados se empiezan a organizar para acudir con el presidente Andrés Manuel López Obrador. Le exigirán se investigue a fondo el delito y castigar a los responsables. Ahora que hizo la denuncia pública, le hicieron llegar documentos y pruebas fehacientes de cómo se tejió la trampa electoral con la que le quitaron el triunfo de la bolsa a la ex candidata panista a la gubernatura, Sonia Mendoza, que alegó fraude de estado.
Precisó que un alto funcionario estatal mandó imprimir miles de boletas para rellenar urnas en la entidad. Se valieron de los ex ediles de Soledad, Ricardo Gallardo Juárez y Ricardo Gallardo Cardona, sobre los que pesan acusaciones de desfalco por más de 2 mil millones de pesos. Clamó al gobernador Juan Manuel Carreras, resolver el entuerto lo antes posible, pues su vida corre peligro. Ya recibió amenazas de extorsión de criminales que se imaginan, tiene gordas cuentas bancarias. Precisó que Carreras no permitió que Ugalde fuera diputado federal, quizás por los espinosos casos del robo de identidades, haberlo denostado en las redes sociales y posibles malversaciones en los ingresos millonarios de los huertos de Santa Rita.
Relató que al estar el 16 de abril en la plaza de armas, miró en el periódico Pulso, una nota sobre clínicas privadas y deudores al gobierno estatal. Nombraron hospitales con muchos millones. Están enlazados con otros. Es decir, pertenecen al mismo dueño. “Noto mi nombre, José Fernando Carmona Cruz, con un pago pendiente por 2 millones 786 mil pesos. Al momento, como hecho adrede, recibo una llamada de una mujer que trabajó antes en la secretaría de finanzas. Me dice que aparecí en el diario local. Debo aclarar el hecho porque pudo ser una homonimia o cierto y es delicado. Lo hice, abordé al titular de transparencia Roberto Castillo Ávila, encargado también del portal electrónico de la dependencia”.
“Les pedí aclarar el error, porque me interesa se resuelva y deslinden responsabilidades. Contestó estar de acuerdo, por lo que iban a visitar las áreas correspondientes. Recorrimos varios departamentos en la secretaría de finanzas y se rastrearon los datos. Aparezco como proveedor de ropa, en la calle Rubí, en el fraccionamiento Valle Dorado, con un pago de 2 millones 786 mil pesos. Sacan fotocopias y dice Castillo, hasta aquí llego, porque tenía que preguntar en otra área, el destino del cheque. Después me pusieron por error una clave presupuestal, con un número y saldo inicial de cero y saldo final cero. Todos se dan cuenta que soy yo, porque tiene el mismo nombre, domicilio y Registro Federal de Contribuyentes. Solo le cambian la terminación de homonimia R21 y me ponen KCA”.
“Pasó el tiempo. No cuento con el dinero para contratar un abogado y me advierten que debo aclarar el asunto, porque si llega un candidato enemigo al actual gobernador, Juan Manuel Carreas, empezarán a rastrear todos los recursos que se gastaron en la secretaría de finanzas. Estoy en riesgo ya que pueden buscar en la secretaría de hacienda que no tenga una homonimia diferente. En el intermedio solicité un trabajo. Se dio la oportunidad luego de platicar con el secretario de seguridad, Jaime Pineda Arteaga. Me dijo que si le podía ayudar al director de seguridad pública, Raúl Alanís y acepté. También de manera simultánea abrí un portal del Universal, conseguí un permiso para lograr dinero extra, pero no me preocupé por saber quién era Alanís”.
“Se trata de una persona especial, bipolar, cambiante. Invité a una compañera a colaborar. Al final me relegaron, atentaron contra mis derechos humanos. Me quitaron como encargado del departamento de comunicación social. Estuve más de un año. Hice monitoreos, recomendaciones periodísticas que nunca se atendieron. Luego me dijeron que no me iban a dar más contratos, que estaba fuera. Abordo al gobernador Juan Manuel Carreras con el que tengo un trato amigable. Le digo que me ayude con el problema de finanzas y mi trabajo, que me costó mucho tiempo conseguirlo y de la nada lo pierdo. Violentaron mis derechos constitucionales”.
“Contestó que le diría a Pineda me atendiera. Le habla a uno de sus asistentes, Aurelio Hernández, pero no arregló nada. Me enteré que lo regañaron por no resolver el asunto. Me mandan después con el secretario particular, Misael Hernández. Hice antesala con el secretario de gobierno, Alejandro Leal, que me dio largas. Tan fácil como decir que no había un convenio. Lo hicieron adrede, les valía un sorbete. Busqué a Hernández, para tener otro acercamiento y me apoyara. Les dije además que tenía pendiente un asunto por el robo de identidad, que debe arreglarse. Hay responsables en el asunto, como el ex secretario de finanzas, José Luis Ugalde. Fue en su momento cuando se registró, por lo que procedí de manera legal”.
“No hubo respuestas. Aunque soy pacifista, tuve que demandar, porque soy localizable para hacienda de algo que no debo. Pagaré los platos rotos y no los que se beneficiaron con mi nombre y datos. Me quedo sin nada y los culpables felices de la vida, cruzados de brazos. Se lo dije a Misael Hernández. Me dijo: no sabes qué gusto le dará al gobernador, te chingues a Ugalde. Quiero suponer porque antes, como secretario de finanzas, en una charla de Ugalde con el ex director del periódico El Mañana, Pascual Oyarvide, le llamó al gobernador pendejo. El doctor en derecho aguantó, no le gusta meterse en problemas. Pero fue un elemento que guardó para no hacer a Ugalde diputado federal. También pudieron incidir los desvíos millonarios en los invernaderos de Santa Rita, donde ubicaron como merma, decenas de toneladas de tomate de primera calidad, que vendían junto con la cosecha que se exportó al extranjero”.
“A Ugalde se le juntó mi caso. Lo abordé y me ignoró, cuando ya tenían una respuesta del portal de transparencia. Todo se le vino abajo. Un amigo abogado me convenció de interponer la demanda. Le llegan informes a Carreras sobre los enjuagues de Ugalde. El punto central era saber quien fue la persona que me suplantó. Nos entregaran la póliza, ya que el pago se efectuó. El responsable de transparencia, Ricardo Castillo y otros testigos, saben lo que pasó. Me cuelgan como proveedor de ropa casi 3 millones de pesos. No todo mundo anda uniformado. No les he vendido ni un cacahuate. No soy proveedor, pero alguien cobró el dinero. Ni un pasante de contabilidad comete un error tan simple. Si sucede, ya no cuadran en muchos casos los números”.
“Los casi 3 millones son una jalada de pelos. Hay gente involucrada, existen situaciones muy graves dentro del aparato de finanzas. No dudo que pudo darse una carambola de pleitos. Es algo que debe aclararse. No le importó a Alejandro Leal, que tiene una gran soberbia. Tampoco a Misael Hernández, que en otra plática me dijo: en el gobierno venimos a hacer negocios. Le pregunto dónde queda la gobernanza, los servicios. Sólo me palmea la espalda. Son situaciones serias, ¿dónde estamos parados?, ¿qué tipo de personas ejercen el mando?. El gobernador actuó de buena fe cuando le mandamos los oficios. Le dio indicaciones al nuevo titular, Daniel Pedroza Gaytán. Le pide aclarar el tema, pero opta por esconderse”.
“Me dice que no existo, no tengo nada que ver en una lista donde aparecen proveedores y acreedores. Ahora no aparezco. Se hará un escándalo cuando salga todo el listado de la gente que no forma parte de ninguna de las transacciones similares a lo que viví. Varían los montos, de los mil pesos a los 11 millones. Hay otros importes que suman mucho dinero. El compañero periodista, Victoriano Martínez Guzmán, que le sabe al asunto, empezó a investigar a fondo y se dio cuenta que hay más personas involucradas. Al inicio aparecieron 150 casos. Cuando se mete, crecen al doble. El monto del desfalco podría ascender a los casi 300 millones de pesos. Los datos están a la vista. Lo grave es que nadie hace caso de los problemas”.
“Acudí también a Mexicanos Unidos contra la Corrupción e Impunidad que encabeza Raúl Olmos de León, que tiene tratos cercanos con la conductora de noticieros, Carmen Aristegui, que ha denunciado latrocinios de muchos personajes. Voy con la Federación de Periodistas de la República Mexicana. Debo aclarar que recibí llamadas de amenazas, para extorsionarme. Me preocupé mucho. Me exigían dinero, suponían que era un proveedor consentido. Anduve con mucho miedo por errores que no cometí. Todo a la larga se agrava con el robo de identidad. Los integrantes de Mexicanos Unidos contra la Corrupción, con los datos que tienen de todas las publicaciones, dan un tiempo para que los abogados se encarguen del caso. Valoran la gravedad del asunto”.
“Sobre todo porque se pone en riesgo la seguridad física. El punto central es que presuntamente soy proveedor, me debían dinero y me pagaron. Cuando la lista apareció, otros implicados me dijeron que no tenían vela en el entierro. A la sección 52 del magisterio le endilgan un adeudo millonario. Es un embrollo entre sindicatos donde no se sabe si deben o les deben. Tampoco se trata de descubrir el hilo negro. Cualquier contador sabrá ventilar que muchos son la misma persona. El litigante Jorge Chessal Palau me envió un link donde retoma la nota de Pulso, en la que se dijo que el gobierno estatal debe hasta la camisa”.
“Vuelve a aparecer mi nombre de nuevo. Se tiene que aclarar para evitar problemas con hacienda. Hay que desmenuzar a cada uno de los acreedores y proveedores para saber cuáles en verdad prestan un servicio. Acudí a la fiscalía a quejarme por el robo de identidad, contra quien resulte responsable. El objetivo de usurpar identidades es quedarse con el dinero. Otros ciudadanos me dijeron que tienen datos de más corruptelas, pero se quieren mantener en el anonimato. Me pondré de acuerdo con mi abogado para ventilar las denuncias en su momento. Es un fraude al erario el robo de identidad. Se trata de dinero de procedencia ilícita para lavarlo. Hacienda tiene la lupa de todos los movimientos bancarios que se registran”.
-¿Con el relevo de Ugalde en finanzas, Daniel Pedroza, existe la certeza de que ya no hay robo de identidad?
-Como responsable del área, tiene que indagar y ventilar las fallas que se dan. Se le llamó para aclarar los errores, pero rápido se sacude, no da la cara. Carreras debe llamar a cuentas a Ugalde. Es lamentable que nunca le hagan caso a los gobernadores. Se debe aclarar el asunto caiga quien caiga. Castigar al responsable o también será cómplice.
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