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No quieren a voceadora cerca de una cl铆nica que podr铆a ser de Gallardo Ju谩rez

La due帽a de un puesto de peri贸dicos que antes se ubic贸 en Manuel Jos茅 Oth贸n, esquina con 脕lvaro Obreg贸n, en la Alameda Juan Sarabia, la se帽ora Margarita 脕vila Mendoza, denunci贸 que la directora de comercio del ayuntamiento de la capital, Dolores Garc铆a Rom谩n, con enga帽os y falsas promesas, la quit贸 de su lugar de origen, para ubicarla a una cuadra de distancia, casi frente al museo del ferrocarril, un lugar olvidado, por el nulo paso de camiones. Lo que impide que muy pocos le hagan la m铆nima compra de revistas y diarios. Est谩 a un paso de pedir limosnas.

聽聽聽聽聽聽聽聽 脕vila Mendoza expuso que el 7 de julio del a帽o en curso fue reubicada. Siempre se mostr贸 inconforme ya que casi no iba a vender nada en su nuevo lugar. Garc铆a le prometi贸 que el cambio era temporal, mientras terminaban el pavimento. El 6 de septiembre, el alcalde Ricardo Gallardo inaugur贸 la calle, pero ya no le permitieron volver a su sitio de origen. Cuando se efectu贸 la ceremonia protocolaria, se acerc贸 al mun铆cipe para explicarle su problema. Cortante, despectivo, le dijo que se dirigiera al ayuntamiento, ya que tales asuntos no le compet铆an.

聽聽聽聽聽聽聽聽 Garc铆a Rom谩n s贸lo le da largas al tema. Argumenta que se trata de un proceso largo que deben revisarlo otras dependencias. La quejosa ya fue amedrentada por la trabajadora Ana Montalvo. Le recalc贸 que de no respetar el nuevo sitio que le hab铆an asignado, se atuviera a las consecuencias.

聽聽聽聽聽聽聽聽 La afectada establece que le ponen trabas porque estorba en la fachada de la nueva farmacia Salud Digna, que seg煤n versiones de comerciantes de la zona, pertenece al millonario edil. Ante las constantes complicaciones que le pone Garc铆a Rom谩n, la voceadora acudi贸 con el defensor de los derehos humanos en la entidad, Jorge Vega Arroyo, para que la salve de los ultrajes de las autoridades a las que paga puntual sus derechos de piso. Le exigi贸 a la funcionaria una respuesta por escrito, ya que le urge resolver su circunstacia cr铆tica.

聽聽聽聽聽聽聽聽 Margarita 脕vila consigui贸 el respaldo de la vendedora de paletas de hielo Ana Mar铆a Ch谩vez. Exigen las dejen dejen trabajar y regrese la ruta de camiones urbanos frente del museo del ferrocarril, lo que tambi茅n afect贸 su nivel de vendimia. No piden nada nuevo, s贸lo que les respeten los lugares de trabajo. Le han planteado a la directora de comercio, instale estructuras met谩licas para dejarlos ofertar sus productos, aunque los beneficiarios las paguen. Pero los ha ignorado. A帽adi贸 que el ayuntamiento pregona respetar las leyes, pero sus representantes las corrompen. No reconocen los permisos que expiden a los solicitantes. Lament贸 que Garc铆a no resuelva un problema que afecta a cientos de familias.

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Para igualar a Holanda y Alemania, hace falta leer 50 libros al a帽o

Por el placer que se tiene a la lectura y con el fin de compartir la dicha que se convirti贸 en pasi贸n, un grupo que labora en el Centro de las Artes, fomenta el h谩bito en ni帽os, j贸venes y adultos. Abordan diversos autores como el poeta local Manuel Jos茅 Oth贸n y otros externos donde se ubica Julio Cort谩zar, Mario Benedetti y Juan Rulfo.

La mediadora del taller, Maribel Alavez Torres, destac贸 que est谩n incluidos en el programa nacional de salas de lectura donde se les capacita a trav茅s de un diplomado de tres a帽os. Les otorgan las t茅cnicas y herramientas para cumplir sus tareas. Les facilitan un acervo cercano a los mil 200 libros que utilizan seg煤n el perfil de los asistentes. Tambi茅n acuden a primarias, secundarias, hospitales, centros de rehabilitaci贸n juvenil, ferias del libro, universidades y reclusorios.

A los adultos los atienden martes y mi茅rcoles, de 10 a 12 y de 11 a 13 horas. Los ayudan a relajarse y avivar la memoria. 鈥淪e conectan las neuronas. Les favorece concentrarse. Ampl铆an el vocabulario, se previene el Alzh茅imer, pues la lectura ayuda a recordar禄.

Alavez dijo que result贸 una experiencia especial el encuentro con j贸venes internos. Las actividades los remitieron a su etapa infantil. Los motiv贸 escribir o dibujar sus propias historias. Al recordar vivencias, solicitaron perd贸n por las equivocaciones que los llevaron a la c谩rcel. Asisten a las casas cunas, donde despliegan el 鈥淏eb茅 letras鈥. Ilustran a los infantes que por maltrato o abandono terminaron el el sitio.

鈥淟a lectura puede llegar a cambiar una vida. La transforma. Se nota en los peque帽os, que muestran sus emociones. Luego buscan los libros. Es algo que les queda para siempre禄, relata Alavez. Hace a帽os, la mediadora Eva Ortega impuls贸 el 鈥淟ibro, viaje y cami贸n鈥 que fomentaba la lectura en los usuarios del transporte p煤blico. Por su 茅xito se aplic贸 en Valles, Matehuala y otras partes donde los camiones y taxis cargaban una mochila con 6 libros para que los pasajeros leyeran mientras llegaban a su destino. Aunque algunos decidieron llev谩rselos.

Un gran impacto tuvo la variante 鈥淩ompecabezas鈥. Consiste en acudir a leer a hospitales, asilos y personas con s铆ndrome de Down. A los peque帽os se les imparte la alternativa 鈥淟ee, crea y juega鈥. Incluye materiales de juego. Alavez expuso que para fomentar y ense帽ar el h谩bito de la lectura, es fundamental dar el ejemplo. Es donde se flaquea, se puede constatar con el presidente Enrique Pe帽a. Comenta que en promedio, un mexicano debe leer cerca de 50 libros al a帽o, para estar a la par de pa铆ses como Alemania y Holanda.

Remarc贸 que falta difundir y dar continuidad a los programas. La gente no acud铆a al Festival de las Letras porque no estaba enterada. Lament贸 que el a帽o en curso, no los hayan invitado a la Feria Nacional Potosina, donde se debi贸 promover la lectura ante miles de visitantes. Lament贸 las estad铆sticas donde se establece que cada mexicano apenas aborda un libro al a帽o. No obstante el regreso a clases, mantendr谩n las puertas abiertas.