Con un desempeño que desde el inicio se vio envuelto en polémicas por la nula transparencia en el destino de los recursos públicos, acusado de autoritario, represor de quienes no compartían su conducta arbitraria, el ex alcalde de la capital, Ricardo Gallardo Juárez, buscó siempre silenciar y demeritar las críticas a sus truculentas acciones. Igual que sus antecesores Mario García y Victoria Labastida, pasaron a la historia como saqueadores de las arcas. Se ubican en el nivel de la infamia. Entre los rubros que más escándalos provocaron se halla el manejo de la obra pública, que entregó a sus prestanombres, socios y amigos cercanos, sin respetar las leyes más elementales. La mayoría de los trabajos los fraccionó de forma chapucera para evitar las licitaciones locales y nacionales. O simuló falsos concursos donde dejó fuera a contendientes que no le convenían, para después favorecer a los que se prestaban a maquinaciones fraudulentas, como pasó en el puente de Fray Diego de la Magdalena, donde cobró 115 millones, sin haber colocado un ladrillo. Dueño absoluto de la hacienda, llegó a externar que era más barato y conveniente hacer con sus empresas los trabajos que se ubicaran en el rango de los 300 mil pesos. Es decir, ejercer toda la partida destinada al rubro, ya que iba a utilizar la treta de subdividir los costos.

Con datos obtenidos a través del Sistema de Solicitudes de Información del Estado de San Luis Potosí, se supo que en lapso del 2015 al 2018, Gallardo Juárez ejecutó un total de 347 obras. Se incluyen algunas que dejó inconclusas Mario García, que se presume, quedaron terminadas. El monto invertido se estima en los 822 millones de pesos. Sin contar los 225 millones 836 mil 781.12 pesos que se destinaron en el puente de Fray Diego de la Magdalena, detenido por las chicanas cometidas al adjudicarse. Se desconoce dónde quedó el monto que ya se gastó. En tres años, Gallardo se dedicó a beneficiar a ultranza a un reducido grupo de contratistas que apenas suman 31. A 11 constructoras que tenían trabajos pendientes las dejó concluir labores, liquidó sus servicios y no las volvió a usar.

Entre las constructoras  de privilegio figura Sarqco Servicios de Arquitectura y Construcción y,  Cumaru´s, que también fueron de las predilectas en Soledad donde fue alcalde Ricardo Gallardo Juárez y Ricardo Gallardo Cardona. Se adjudicaron  93 contratos a  empresas relacionados a una sola familia. Resalta también   Construcciones y Desarrollo Barfe, de Fernando Rojo Ocejo, quien tiene tratos cercanos con Gallardo Cardona, por lo que fue director del Fomento Económico con el edil Gilberto Hernández Villafuerte. Fernando Ocejo es hermano de Luis Miguel Rojo Ocejo, “El Oso Rojo�, quien fue arrestado por ser el operador financiero del Cártel de los Zetas en San Luis Potosí.

(Tomado de la revista impresa /Enero 2019)

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