La Suprema Corte de Justicia debe de considerar y echar para atrás su decisión de considerar a los policías como trabajadores de confianza y no sindizalizados, eliminándoles derechos que todo trabajador mexicano tiene derecho.

Así lo dijo la candidata a diputada federal por el 6 distrito Amelia Araiza Dávila quien hizo hincapié que muchos policías son asesinados en su trabajo y además no se les brinda adecuada protección, pero eso sí, reciben sueldos raquíticos y muy pocas prestaciones, tanto así que las viudas e hijos de policías fallecidos no reciben nada cuando estos se van de su vida.

“En San Luis Potosí, mucho son policías porque no encuentran trabajo de otra cosa y pocos son los que sienten amor a ese desempeño, la vida laboral de estas personas es de muy pocas prestaciones y a cambio les exigen demasiado como el examen de control que además implica amenazas e intimidación, hostigamiento para quien lo hace, son obligados y hasta amenazados con ser despedidos sino lo realizan�.

Dijo que la Comisión Nacional de Derechos Humanos debe de emitir una recomendación en todo el país de este tipo de hostigamiento que reciben los policías: “Ser juez hoy es una vergüenza agravada, con poca o nula conciencia de Justicia Social y humana, hay que defender a la dignidad humana y considerar que en el aspecto de la seguridad existen muchas cosas que cambiar y esto debe de empezar con las condiciones laborales, su derecho a la libre asociación que marca la Constitución, además de prestaciones dignas para que se acabe la corrupción y la ineficiencia en el poder judicial, pero tenemos letrados que no hacen caso, que prefieren que la sociedad siga sufriendo y se sienta amenazada�.

Comentó la abanderada que también el nuevo Sistema de Justicia Penal tiene grandes huecos y además permite injusticias, que muchos salgan de la cárcel siendo culpables y todo queda en el morbo mediático de quienes tienen influencias o no: “se emiten juicios sobre la inocencia o culpabilidad antes o después del debido proceso, es un delito culpar a cualquier persona brincándose la presunción de inocencia y las evidencias, es delito destruir una imagen y buen nombre, es hora de que se acaben los beneficios para unos cuantos, los mexicanos deseamos respeto a los derechos humanos y a los derechos laborales�; concluyó.

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