A).- Universalidad. Es el poder de la universidad como una estructura básica cultural, permanente y evolutiva, como una comunidad de carácter adaptable, positiva, con disposiciones y modos de comportamientos no estáticos, rígidos, anquilosados, obsoletos, antidemocráticos y anárquicos. Con vida propia y de servicio a la humanidad. En fin la suma del conjunto de valores indivisibles, existentes, coexistentes y de reconocimiento en todo lugar, tiempo y de aceptación permanente y general.

B).- Función de la universidad. En recién reunión de académicos universitarios, se expuso la idea de construir un Hospital Universitario, como la creación de otra Facultad de Medicina, bajo el argumento de que la población se ha duplicado en los últimos 30 años, lo mismo que en estados circunvecinos como Zacatecas, Aguascalientes y Guanajuato a los que el Hospital Central les presta servicios. Sobre todo por el costo de más de 100 millones de pesos que las compañías aseguradoras le cobran a la comunidad universitaria por atender a sus integrantes. Somos más de 25 mil universitarios que requerimos de la prevención, atención, hospitalización y tener salud. En suma la necesidad de la creación de un Hospital Universitario de servicio a la sociedad es impostergable. Algunos destacados profesores argumentaron que no era el objetivo de la institución.

Lo que nos conduce a negar la lucha de clases, nos exige no confundir la política partidista, a los universitarios. Lo que castra a los miembros de la comunidad a dejar de ser la vanguardia de la sociedad, misma que después de tres décadas, hemos de lamentar en su pérdida. Inconcebible una universidad sin politización, sin ideales, sin teorías de vanguardia, sin facultades de ciencias políticas, filosofía y humanidades. Inconcebible una institución sin ser la vanguardia de todo cambio social, económico, político, científico, técnico y cultural.

Inconcebible una institución envuelta en la dinámica evolución del devenir histórico imparable, con reglas, estatutos, leyes, totalmente desfasadas, dignas de la prehistoria, muy lejos de la modernidad. En síntesis, equivale a tener un órgano conservador, lejano de la verdad, sin lucha activa.

Entonces es por lógica la antítesis de su existencia. Nuestra universidad, sus maestros, estudiantes, trabajadores, investigadores, funcionarios, líderes, consejeros, sindicatos, autoridades, muy lejos de lo real, víctima de la comodidad ante la insoslayable vida. La universidad es servicio, recordemos que la vida es servir, quien no sirve no vive, quien no sirve no existe. ¿En qué sirve y a quien sirve la universidad?

C).- La universidad al servicio del pueblo. Claro que prestamos atención legal, médica, contable, fiscal, estomatológica, enfermería, agronómica, psicológica, académica, de investigación, educativa, de extensión, divulgación, económica, clínica, laboral, artística, técnica, matemáticos, físicos. Muy raquítica, pero, innegable. Sin embargo ante las calamidades que afectan a toda la gente, económicos, inflacionarios, pérdida de los empleos, actos políticos, de inseguridad, de corrupción, criminales, drogadicción, pandillerismo, menor credibilidad en las instituciones, narcotráfico, emigración, ingobernabilidad, ideologías, sistemas económicos, devaluaciones de la moneda, subdesarrollo económico, catástrofe en la moral y sobre todo en el derrumbe de la familia, sin recatos religiosos y sobre todo sin escuelas ni facultades que nos hagan razonar y filosofar.
Si en algo de lo señalado estamos equivocados, existe el diálogo de la inteligencia.

D.- Influencia universal como centro del poder. Nada es ajeno a la dependencia de cualquier sector de la sociedad a la universidad. En torno a su existir giran la salud, colegios de profesionales, la investigación, la justicia, la política, los gobernantes, los políticos, la cultura, el arte, la industria, el comercio, la administración pública, el deporte, los partidos políticos, la ley, la banca, las finanzas, las iglesias, la religión, la lucha de clases, los ideales, la democracia.

Por consecuencia, la institución es altamente codiciada para sus intereses, en su control, manejo y tendencias económico-político-social-religioso-cultural-filosofía, por grupos de poder de toda índole. Los gobernantes, líderes, representantes ante las cámaras y congresos, ejecutivos, secretarios de estado, directores, presidentes de empresas, financieras, bancos y organismos, jefes y demás ciudadanos destacados que salieron de la universidad.

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