La odisea para exhibir el estreno de Roma en la Cineteca Alameda

18 febrero, 201911:30 pmAutor: Paola Moreno GuzmánCultura Destacada

Después de un gran esfuerzo, Omar Velducea, director del Festival Internacional de Cine en San Luis Potosí, de la mano de un gran equipo, lograron proyectar en la Cineteca Alameda, la película Roma, la más reciente obra del director mexicano Alfonso Cuarón Orozco, días antes del estreno mundial en la plataforma digital Netflix. Un hecho que parecía casi imposible de lograr. El promotor destacó que la travesía para lograr traer el filme al territorio potosino resultó complicado. No por la falta de contactos, fue por los limitados recursos económicos con los que contaban. “En el 2017 hubo la oportunidad de conjuntar a varios profesionales como Carlos Rodiza, director cinematográfico, Amaury Jonguitud, licenciado en relaciones internacionales, Manuel Alba, licenciado en mercadotecnia y Alfredo Rodríguez, preservador y restaurador de archivos visuales. Todos fueron indispensables para lograr el proyecto. En el 2018, como cada año, nos enfocamos en una temática y se eligió movimientos sociales. Propuesta de Alfredo Rodríguez”.

Omar Velducea egresó de la carrera en Ciencias Antropológicas en la Escuela de Educación Superior en Ciencias Históricas y Antropológicas. Es un realizador y autodidacta de la cinematografía. En conjunto con un grupo de cinéfilos, produjeron más de quince cortometrajes como “El perro”, de Isaac Betancourt. “El Tarot”, de Ronnie Medellín. “Aversión”, largometraje de Rafael Piñero. Como director hizo tres cortometrajes escritos de la mano de Carlos Guevara. Participó en el “No todo Film Festival”, “Segundo de Suerte”, selecciones para el Canal Trece de Universal en España. Como parte de su experiencia, participó con Edgar Rodríguez, Jonathan Gamboa y Alfonso Martínez en La Trinchera, programa de radio pop modernista. En el 2009 decidió crear la asociación Daguerrotipo con el fin de apoyar a los nuevos talentos potosinos. Funge del 2012 hasta ahora como director del Festival Internacional de Cine en San Luis Potosí.

“A partir de entonces nos dimos a la tarea de buscar películas que directa o indirecta hablaran del tema. Encontramos Roma, postulada con sarcasmo y humor, ya que si bien habíamos tenido filmes con premieres importantes, no había sido hasta después de que pasaran por festivales de gran edad. Antes de elegir Roma, teníamos otra película asegurada, de un director también reconocido. Pero al último minuto nos canceló. No obstante, Roma seguía en nuestras cabezas como una alternativa. Decidimos enviar un correo a Pimienta Films, una casa independiente mexicana. Sin embargo, nuestro mensaje era uno más de los cientos de solicitudes que recibieron, por lo que se perdió por más de un mes”.

“En el lapso hicimos constates llamadas al Instituto Mexicano de Cinematografía como a la empresa de Netflix. El IMCINE nos dijo que para obtener la película, teníamos que cumplir ciertos requisitos. El primer filtro era directo con Nicolás Celis, productor de instituto, por lo que decidimos hablar con Iván Trujillo, ex director del Festival Internacional de Cine en Guadalajara. Le comentamos la posibilidad de poder tener un acercamiento con el productor o al menos que leyera nuestra solicitud. La nueva legislatura desconocía nuestra iniciativa acerca de la Ley de Promoción y Desarrollo del Arte Cinematográfico en el Estado, por lo que me entrevisté con varios diputados, como Laura Silva Celis, prima del productor de IMCINE. Le sugerimos que abogara para que de cierta manera tomaran en cuenta nuestra solicitud. Pero nos topamos con la grata sorpresa de que ya nos tenían contemplados para exhibir la película. Pero solo sería posible hasta después de que fuera exhibida en el Festival Internacional de Cine en Morelia. Además de que requeríamos de un equipo especial, el cual no se tenía en la Cineteca Alameda, lugar donde buscamos exhibirla. Requeríamos como mínimo, un sonido 7.1 estéreo y un proyector 2k”.

“La circunstancia se tornó difícil, teníamos el tiempo en contra y un presupuesto muy corto para lograrlo. Nos dimos a la tarea de buscar apoyo en la Secretaría de Cultura, pero no pudieron ayudarnos, ya que nos habían proporcionado antes una camioneta. Buscamos otros patrocinadores e instituciones municipales y estatales pero no tuvimos éxito. Poco después, el alcalde Xavier Nava Palacios nos abrió las puertas para presentarle el proyecto. Por la falta de dinero, no se pudo. En la cita se encontraba Federico Mendizábal, subdirector de desarrollo económico, que nos vinculó con varias empresas que estaban interesadas en el asunto. Sin embargo, por falta de tiempo, no se pudieron sumar al acto, pues se presentaba en escasas semanas. Y cuando todo no podía estar peor, nos hablan de Pimienta Films para preguntarnos si era posible rentar un proyector de 4k en lugar del 2k. Lo difícil parecía imposible, teníamos que conseguir un presupuesto cercano a los 120 mil pesos en tan poco tiempo y encontrar otro proyector de los que en México hay muy pocos disponibles”.

“El tiempo y el dinero jugaban de nuevo en nuestra contra. Hubo algunos colaboradores que dificultaron aún más llevar a cabo la proyección de la película, pues recomendaban abortar y dejar a un lado el estreno. En cierta manera tenían razón, pues seguíamos sin tener patrocinio para el proyector. Entonces el compañero Alfredo Rodríguez me comunicó con Hugo Ocon, que después de negociar por unos cuantos días logramos conseguir barato el proyector y los técnicos que vendrían. El único inconveniente era saber si llegarían a tiempo, ya que debían viajar en ferri de los Cabos a San Luis Potosí. Todavía no podíamos anunciar nada hasta que se definiera la información de que se lanzaría. Era la última y segunda proyección en 4k en un festival, antes de su estreno mundial en la plataforma de Netflix”.

“Por fin ya teníamos película y proyector, pero nos faltaba quien patrocinara el pago del proyector. El mismo día en la tarde me proporcionaron una última empresa que fue también una última oportunidad de probar que los empresarios potosinos también estaban comprometidos no solo con las causas sociales, también con la cultura. Hice la llamada y me contacté con los representantes de Tecnopiso, que después de analizar la propuesta, tomaron la decisión de sumarse. Al fin teníamos lo necesario, habíamos logrado lo que parecía imposible y días después nos autorizaron hablar de la película y su inauguración. Mandamos imprimir cortesías, carteles. Todo corría de lo mejor hasta que la mañana del 14 de noviembre, me llama Hugo Ocon para decirme que el ferri se había retrasado pero que ya estaban en la ciudad de México. A solo un día para que se llevara a cabo la apertura de la sexta edición del Festival Internacional de Cine con la proyección de la película Roma en la Cineteca Alameda. Estábamos emocionados y nerviosos. Habíamos tenido problemas con el audio de la sala, por lo que no nos permitirían proyectar la cinta. Afortunadamente hubo disposición del equipo de la cineteca, su director Mario Candia y los técnicos expertos representados por Hugo Ocon. Todo se pudo solucionar. Logramos exhibir la película sin ningún problema, hubo lleno total. Varios días después del estreno, festivales y cinetecas consultaban a nuestro programador Alfredo Rodríguez para poder obtenerla en Blue Ray. Me di cuenta que el esforzarse por una cinta de tal calidad, nos abriría ventanas de oportunidades, sobre todo para otros realizadores locales que estrenarían también sus obras como Ayotzinapa, el paso de la tortuga de Enrique García, Sacúdanse las penas de Andrés Ibáñez y Cómprame un revólver, de Julio Hernández. Ahora la película del director mexicano está nominada en 10 categorías en los tan aclamados premios Óscar 2019. Entre los que destacan mejor película, mejor filme de habla no inglesa, mejor dirección, mejor actriz, entre otros”.

Aunque ha tenido diversas críticas, como ser un filme sobreevaluado, que no cuenta con una trama trascendente, Velducea subrayó que el éxito se debe a la certeza y estrategia que mostró Alfonso Cuarón y Eugenio Caballero, productor del diseño, al proyectar diversos aspectos culturales y sociales de la ciudad de México en los años setenta, como la reconstrucción de banquetas, lámparas, tiendas y fachadas. Además de mostrar la separación de clases que muchas veces son marcadas desde los apellidos. “No hay duda de la calidad del trabajo con el que fue realizada, se nota de inmediato en cada escena. Los temas que se tratan, por sus características, pueden o no gustar. El espectador no tiene compromiso alguno más que el de ser sincero y decir si fue de su agrado o no. El que se conecte con la película va más allá, es como pedirle que tenga una comprensión de técnicas y aspectos narrativos. Decirle que analice lo que ve es como exigirle una posición que no debe como público, ya que el cine es más conocido como mero entretenimiento”.

Respecto a las nominaciones que ha logrado Roma en diversos Festivales Internacionales de Cine, Omar Velducea aseguró que obtener un Óscar no es siempre sinónimo de calidad, ya que existen muchas películas de directores mexicanos que debieron estar nominadas como Hasta los dientes, Cómprame un revólver, Un filósofo en la arena, La Negrada, pero algunos medios no les dieron la importancia y difusión. Se fueron muchas veces por lo seguro, sin tomarse el tiempo de investigar más. Aunado a los acuerdos de distribución que se manejan en las cadenas de cine, Roma se estrenó en la plataforma de Netflix y no en las salas de Cinépolis porque los derechos como productora, son exclusivos de la plataforma digital. Además que Cinépolis exige 90 días para exhibir la película en sus salas”.

El cinéfilo local busca fomentar el apoyo a la cultura en el estado, además de proporcionar mejores oportunidades a los nuevos talentos, por lo que en el 2009 decidió crear la Asociación Daguerrotipo. A pesar de que diversos directores mexicanos han logrado tener éxito en el extranjero, las oportunidades y el respaldo son muy escasos, “Daguerrotipo trata de vincular de manera gratuita a cualquier realizador en áreas como pre producción, producción y post producción”. Velducea, como director del Festival Internacional de Cine en San Luis Potosí, provee una plataforma de exhibición, talleres, cursos, conferencias, convivencias con realizadores foráneos, alianzas de colaboración, premieres de realizadores potosinos y del cine mexicano, al otorgar el “Adolescente Huasteco”, figura representativa del estado.

 

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